Anoche me quedé dormida sobre tu recuerdo.
(Hay muchas cosas que agradecer, todos los días, no únicamente hoy, solo que el enfoque está en lo que falta; pero al cambiar de panorama, se podrán distinguir las tantas cosas y situaciones que se pueden agradecer)
Gracias.
jueves, 28 de noviembre de 2013
jueves, 21 de noviembre de 2013
CINTHYA DIAZ
Suena el teléfono a las cinco de la madrugada. Me despierta. Contesto. ¿Se encuentra Cinthya Díaz? No señor, aquí no vive ninguna Cinthya Díaz ni la conozco ni nada, hace meses que hablan buscándola, sé que le debe a medio mundo, pero esa persona les ha dado un numero equivocado, aquí no vive.
De nuevo suena el teléfono a las seis treinta de la mañana y la misma explicación. Ese día, por ser festivo, creyeron que la encontrarían. El teléfono retumbaba por todo el departamento. Rompieron récord y llamaron diez veces buscando a Cinthya Diaz, me tenían harta, tuve ganas de aventar el teléfono pero me contuve. Desde hace más de un año que la buscan y por más que les digo que no la conozco, continúan molestando. No sé si ir a profeco, condusef o a dónde diablos ir.
Por lo general no cocino en día festivo. No tenía con quien compartir mi antojo de pizza, así que me sacrifiqué y fui por una pizza a la leña, esas que están muy de moda. Toda me la terminé. ¿Aceptas tarjeta? pregunté. Después de una respuesta afirmativa, entregué tarjeta e identificación. Firmé el recibo y antes de salir me regresé a dejar propina.
- Gracias Cinthya, vuelve pronto.
De nuevo suena el teléfono a las seis treinta de la mañana y la misma explicación. Ese día, por ser festivo, creyeron que la encontrarían. El teléfono retumbaba por todo el departamento. Rompieron récord y llamaron diez veces buscando a Cinthya Diaz, me tenían harta, tuve ganas de aventar el teléfono pero me contuve. Desde hace más de un año que la buscan y por más que les digo que no la conozco, continúan molestando. No sé si ir a profeco, condusef o a dónde diablos ir.
Por lo general no cocino en día festivo. No tenía con quien compartir mi antojo de pizza, así que me sacrifiqué y fui por una pizza a la leña, esas que están muy de moda. Toda me la terminé. ¿Aceptas tarjeta? pregunté. Después de una respuesta afirmativa, entregué tarjeta e identificación. Firmé el recibo y antes de salir me regresé a dejar propina.
- Gracias Cinthya, vuelve pronto.
viernes, 1 de noviembre de 2013
No te revientes reata, ya es el ultimo estiron
Los días antes del examen son los peores para mi pobre cuerpo. Bebo como pirata, hago ejercicio como enloquecida, duermo irregular y aun así, el muy lindo me responde. Alejada del mundo: así han sido los días previos a defender tesis. Ahora entiendo que la vida me pusiera donde estoy. Y al igual que en la carrera, la complicación esta únicamente en mi mente.
Afortunada soy de que todos mis seres queridos me entienden y no me joden al respecto.
Cuando termine iré a un lugar desconocido, para que deje de serlo.
Cuando termine leeré los libros que tengo haciendo fila en el librero.
No encuentro mejor manera de cerrar el 2013
Hotel Habana
- Te veo muy calladita, no creo que vayas a servir para este negocio. Debes gritar de "placer", exagerar, decirle que tiene la bichola mas grande que haz visto, así lo vas a hacer creer que es el mas chingon y se va a ir satisfecho. Con suerte hasta te haces de clientes regulares. Así es esto, tu finge que te gusta y que lo disfrutas. El verdadero negocio esta en el placer mental, en hacer creer cosas que no son.
Lo cierto es que todos son unos pobres infelices.
Incluidas nosotras.
Lo cierto es que todos son unos pobres infelices.
Incluidas nosotras.
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