miércoles, 1 de mayo de 2013

Ya se que tengo que dormir con un papel y pluma cerca de mí cuando duermo. Ya se que a la mañana siguiente nunca recuerdo los textos que se gestan cuando voy cayendo en el cenote que es mi sueño profundo.

Tenia una buena historia, pero mi sueño era más bueno aun. Es como si me pegaran con un marro, es más fuerte que yo.

Me duermo a las tres, le dije un día: Una, dos...

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