Disciplina es todo lo que se requiere. Una vez te lo dijo la madre Adela y te valió madres, pero la vieja tenía razon. Las primeras ocasiones dejabas un desorden: Todo tirado, manchas por todos lados, utensilios que dictaban tu camino por la casa. Absolutamente predecible.
Fuiste aprendiendo.
En cada nuevo encuentro que tenías, empezabas a ser más sutíl, más limpia, menos movimientos, requerías de menos fuerza, no había forcejeos.
Menos trabajo y mas deleite.
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1 comentario:
Hola!
tiene alguna conotación sexual?
Bernardo y yo discerníamos al respecto
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